La rebelión de los Zendales


Una breve percepción y unas cuantas anotaciones sobre la novela de Ronald Flores, La Rebelión de los Zendales. **

Novela cínica y sarcástica. Entre todas esas palabras hilvanadas, esta novela se muestra como las anotaciones de un estudiante que, mientras recibe clases de Estudios Sociales, toma los datos y reescribe la historia, la que por momentos parece más real que ella misma.

Es como si al reconocer que la historia la escriben los ganadores, entonces todos tenemos el derecho de reescribirla, pues nuestra versión no será más torcida que la que nos enseñan. Hay varios factores recurrentes en esta novela. Uno es la del cronista, espectador mudo de los hechos, siendo ese el punto de partida en la obra. Luego aparece la naturaleza del sexo como factor transgresor. Nos recuerda que el sexo y las orgías no es nada de otro mundo y que es un hecho que ha caminado con la historia desde siempre en todas las culturas del globo.

Luego viene la abstracción espiritual. La identificación regional que adorna la obra, esas cosa que solo un guatemalteco (debería) o alguien que sepa del imaginario esotérico guatemalteco podría entender. Aparte, también esta el escenario sociocultural de la novela. Es la presentación, la escenografía territorial de la época, donde incluye la estructura de las capas sociales en el país que, como bien revela el autor, han estado y estarán presentes no sólo en Guatemala, sino en Latinoamérica entera. Es una novela cínica, porque nos presenta situaciones deshonestas sobre todo con la religión y el tratamiento social que persisten en el país.


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Al escribir una novela sobre eventos históricos guatemaltecos, es más que obvio que la violencia está presente, (la que no ha pasado de moda) revelando así mismo eventos atemporales de nuestra identidad. En la obra insiste en el conflicto religioso, el que parece fue resuelto con el sincretismo en estos países de orígenes politeistas. Con todo esto, la novela se nos va revelando como la crónica de La rebelión de los Zendales , en un lugar entre México y Guatemala durante la colonia. Y aunque sabemos que es novela, Ronald Flores cuenta la historia de tal manera, que nos hace creer que la historia, si la hubieran escrito los conquistados pudiera ser como la presenta. Es una historia guatemalteca que se perderá en la memoria de quien la lea, porque en la novela parece que eso somos, los que olvidamos.

Dentro de La rebelión de los Zendales

“Sin embargo, el fraile Ximénez aún recuerda aquellos hechos que lo estremecieron como nada antes en su insignificante andar”.

“El verdadero botín del nuevo mundo era un puesto en la administración de las colonias”.

“En cuyas muecas se advertía un dolor antiguo, una rabia contenida ladinos o mestizos porque no eran criollos ni nativos sino ambas cosas y ninguna a la vez”.

“De la violencia con la que actuaran, pensaba, dependía el orden y la paz social de la región. Ni modo que cruzarse de brazos y esperar que las cosas se arreglaran solas”.




**Ilustraciòn cortesìa Alejandro Azurdia.

Comentarios

El Zopilote dijo…
Buen blog mano, tiene de todo tus criticas de cine me gustaron (principalmente la de Batman claro jeje) tu post sobre el gato felix buenisimo...casi nadie le pone coco a lo dementes que esas caricaturas eran y continuan siendo y tu reseña de la rebelion de los zendales muy buena tambien no he tenido el gusto de leerla pero supongo que eventualmente.

saludos,
Anónimo dijo…
Gracias por tus comentarios, Gabriel. Sinceramente, Ronald
David dijo…
Como soy de ir mucho al cine esta bueno tener la posibilidad de disfrutar al ver películas y poder también hacerlo luego de ver las criticas que encuentro en internet. Cuando me fanatizo mucho con una peli me gusta imprimirme con mis impresoras laser la portada de la película

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