SAT/AN “no quiere tu alma, quiere tu dinero” (¿fin?)

Siempre he pensado que en el sountrack de mi vida, hay una trompeta con sordina, un bajo y una batería con escobillas, y aveces, un corno francés. Los instrumentos interpretan música al compás de la situación. En este caso, un sufrimiento muy, muy lento.

Parte 1

Parte 2

Asustado, serio, enojada, reprochándome, cuestionándome. Todo en un instante. Saliendo de la SAT me regalaron una libra de tierra y una bolsita de semillas... “para que piense en el futuro” -me dijo la señora, era una campaña del INAB o algo así-, No quise decirle nada, que más daba. Seguí caminando. Pensando, (a pesar de los murales, el centro cívico puede ser un lugar espeluznante cuando recibís noticias así) ¿a quien le pedía ayuda?
Los amigos que tengo no tienen a su disposición dinero para prestar sin ninguna garantía. Y los que sí lo tienen, no me lo darían o no les tengo tanta confianza como para hacerlo. Fulano no tiene, Sutano tampoco... Perensejita sigue viviendo en Holanda (y todavía le debo). Digamos que solo podía pensar en mis amigos por lo que mis opciones eran poquísimas, es decir 2, pero uno estaba preso en el Reclusorio Norte (más información en Noticias para Dios).

Acá termina el martirio...

¿Qué onda vos... cómo estás?

Bien gracias... trabajando, ¿listos para el viernes vaa?.

Simón, pero como siempre, pero te llamo por otro asunto. Vos sabés que yo solo a una persona le tengo la confianza de pedirle pisto y esa persona vas a ser vos hoy. Tengo un gran vergueo con la SAT que otro día te explico. ¿Me podrías prestar Q3,500 ($420)? con eso ajusto lo que me dieron de bono 14 (-era el primero que recibía en mi vida-) y así logro pagar los primeros Q8 mil ($961.53) que debo de impuestos.

... ¡Ala puta! ¿y cuanto debés pues?

¿Para que querés saber? ¡Es mucho pisto, pero quiero empezar a pagar ya!

¡Pero decime cuánto debés!, quizá pueda dártelo todo, claro con intereses, ambos sabemos que ningún banco te prestaría el dinero.

Porqué me haces esto cerote... es humillante, es mucho pisto y punto.

Decime maricón si no, no te presto el dinero.

¡Digamos que debo tres y medio veces tu suelto, sanguijuela burócrata y mal chimada!

POR....LA...GRAN...PUTA...GABRIEL....EN...QUE...PUTAS...ESTABAS...PENSANDO...PEDAZO...DE..MIERDA...MAL...PARIDA.....

¿Bueno me vas ha ayudar o no?

Ala puta que chimada cerote... ala verga, me hiciste pensar en mis tarjetas de crédito, puta madre, ahorita llamo a mi contador para que me aclare esa onda, a mi no me cogen (un año después, las tarjetas se lo cogieron pero esa es otra historia).

¿Eso es un sí o un no?

¿De qué?

¿¡Me vas a prestar el pisto o no cerote!?

Ah jajajaj, este.... simón.... si fijo ahuevos. ¿Pero cuando me lo pagás?

Pues creo que tendría que ser algo así como Q500 ($60) quincenales no puedo darte más, y me quedo bien pizado. Ya no voy a pagar la U (esa es otra Odisea).

Va, ta bueno mañana te lo paso dejando a tu casa.

Nombre sabés qué, juntémonos allá en la SAT, esa mierda la tengo que pagar ahí.

Nombre rey mañana no puedo, tengo un vergueo en el Congreso, mañana hay sesión, tengo que ir a cubrir esa mierda.

Puta cerote, me estas pidiendo que me vaya en camioneta y luego camine del Centro Comercial de la Zona 4 a la SAT con Q8 mil pesos en efectivo?

¿Sí, qué tiene?

Ala verga, como es posible, de verdad que me desconcertás cerote, me pueden asaltar mierda, haceme el favor, que te cuesta.

Para que sos irresponsable. Anda pagá y caminá, hacele huevos culerito.

Gracias mierda, gracias amigo, ojalá todo te salga bien en el Congreso mañana cerote.

(fin de la conversación)

Nunca me la he pasado tan mal en esta puta ciudad, qué digo, siempre hay un momento peor, pero digamos que es uno de los peores. Caminé lo más rápido que pude. Llevar tanto dinero liquido me hacia dudar de cualquiera. Todos tenía cara de ladrones, todos. En esos momentos pensaba, “ojalá creyera en Dios, así le pediría superprotección”.

Llegue a la SAT al fin. Llené el formulario 1120, o el número que sea y pague dos o tres trimestres, no lo recuerdo. Subí con aquélla señora que me había atendido, a partir de ahora como mi asesora tributaria, y llegué con las copias de pago, no sabía que la señora estaba de muy mal humor, muy distinto a nuestra última reunión.

Buenas, vine hace unos días por una carta que recibí de la SAT y usted me dijo que....

¿Ya pagó?

Si pero sucede que...

Alagran... le va bien vaa, de ¿dónde sacó tanto dinero?

No, lo que pasa es que no pagué todo, pagué estos trimestres mire, entonces mi pregunta es....

Mire joven, entiendo su situación pero, no crea que pagando un par se librar de todo.

No señora, no busco eso (el amable, cándido y risueño Gabriel que todos conocen desapareció por completo y alzó la voz), ¡yo le traigo estas facturas porque la última vez usted dijo que se las mostrara para ver si el sistema estaba funcionando bien, y no me lo siguieran recargando. Ahora bien, ¿qué hacemos con el resto de trimestres?
Es que acaso no le pueden poner una pausa a la deuda. De verdad tiene que seguir, sí me comprometo a pagar, pero denme un plazo es que no tiene sentido, que me suban y suban los intereses, haga cuentas señora, le digo cuanto gano, solo destinando mi salario entero saldría de esta deuda en seis u ocho meses. Razone, no tiene sentido. ¿En realidad no hay una solución?

Lo siento joven así son las cosas en la SAT, si no paga hay multa e intereses. Así es y así será.

Entonces dígame, cómo hago para ir calculando los intereses, porque sucede que cuando termine de pagarle a la gente que me dio el dinero para pagar estos trimestres, empezaré a pagar los que me hacen falta con la SAT. Sería tan amable de decirme la formula o la ecuación, ¿Sobre que porcentaje es?.

Mmmm lo siento joven. Eso no lo sé. El sistema trabaja con una formula que no conocemos nosotros. Es una ecuación que parte de la deuda, la multa, y la mora...

¡Si claro, la mora sobre la mora, claro está, como una tarjeta de crédito que bien que no son banqueros!

Si así es joven, prácticamente cada vez que venga a pagar la cuenta será distinta. ¿algo más en lo que le pueda ayudar joven?...

No gracias seño, que su Dios la bendiga.


Salí de la SAT... llegué al trabajo... directo al departamento de Contaduría.

Tomy, mirá vos, disculpá, la vieja puta de la SAT dice que hay una fórmula que solo ellos conocen para calcular los intereses, ¿Eso es cierto?

Mjm, simón vos, asaber cual será, una vez me puse a adivinar y no, nunca me salió el resultado igual.... saber cuál será.... ¿Y como te fue pués? ¿Cuánto te cobraron?

No mucho, era un trimestre el que debía. (Mentí, para que ese hijo de puta se riera de mi estaba, ya no seguí la conversación).

Los días empezaron a pasar y pasar.... jamás regresé a ese edificio de mierda, pague mi deuda al prestamista, puntualmente claro está. Perdí el trabajo y las facturas las metí en un sobre dentro de un cofre que tengo años de no abrir. No sé que más hay dentro, solo se que ese sobre está ahí.

No sé si soy un evasor, un ladrón o una víctima, la verdad ya no me interesa. Lo cierto es que aun tratando de hacer las cosas bien, todo sale mal. De nada sirve aceptar el error. Hay errores que se pagan muy, muy caros, aunque pague IVA e ISR, para la SAT nunca es suficiente. Estos son errores que te perseguirán por siempre (como a mis padres el tener hijos)...

Este error, en este caso, me persigue cada seis meses o cada año no lo sé. Cada vez que alguien me dice, ya llenaste tu formulario de la SAT para el ISR... un cana nueva aparece en mi cabeza... un mal sabor aparece en mi boca, y las ganas de corren me atacan sabiendo que hacerlo no evitará nada.... absolutamente nada.

Pepitazo: “As certain as death and taxes…”, Meet Joe Black.



SATAN no quiere tu alma, quiere tu dinero

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